“¿Cómo es posible tratar de exterminar a un pueblo entero? ¿Por qué y para qué? Nunca podremos entenderlo. Nunca podremos olvidarlo. Nunca seremos capaces de perdonar esto”, dijo el presidente Volodymyr Zelenskyy el 28 de noviembre, el día de la memoria de las víctimas del Holodomor (hambruna organizada deliberadamente) en Ucrania.

Recordemos que el Holodomor de 1932-1933 ocupa un lugar especial en las páginas trágicas de la historia de Ucrania. Sus víctimas, según diversas estimaciones, fueron de 4,5 a 10 millones de personas.

Con el establecimiento del régimen comunista se produjeron cambios en la vida de Ucrania, que afectaron a la vida campesina tradicional. El gobierno soviético imponía nuevas costumbres al pueblo ucraniano, lo obligaba a abandonar su pasado, no le dio la independencia que había prometido desde el principio.

Las políticas del régimen soviético provocaron protestas de los ucranianos. Los historiadores han registrado cerca de 4 mil acciones masivas de protesta de los campesinos a principios de la década de 1930 contra la colectivización, el robo, el terror y la violencia llevada a cabo por las autoridades.

Y luego I. Stalin atacó al campesinado ucraniano como la principal fuerza de resistencia a la ideología comunista, portadora de la tradición, la cultura y el idioma ucranianos. En 1932 para Ucrania fueron establecidos planes de entrega de cereales al gobierno cuya ejecución no era realista. Por Kremlin fueron deliberadamente creadas condiciones con el fin de exterminar a una parte de la nación ucraniana mediante la confiscación por fuerza de todos los productos alimenticios y la prohibición a los ucranianos de abandonar los territorios afectados por la hambruna.

En la primavera de 1933 la mortalidad en Ucrania alcanzó proporciones catastróficas. El pico del Holodomor cae en el mes de junio. En aquel entonces cada día 28.000 personas murieron como mártires, cada hora, 1168 personas, cada minuto, 20 personas.

El gobierno soviético hizo todo lo posible para ocultar este crimen contra todo un pueblo. Solo después de que Ucrania obtuvo la independencia se eliminó el tabú de este tema. Y el 28 de noviembre de 2006 la Verkhovna Rada (parlamento) aprobó una ley que reconoció el Holodomor de 1932-1933 como genocidio del pueblo ucraniano.

En los años de1985-88 una comisión del Congreso de los Estados Unidos investigó la hambruna en Ucrania. En sus conclusiones señaló que "Joseph Stalin y su séquito cometieron un acto de genocidio contra el pueblo ucraniano en 1932-33". Las conclusiones de la comisión abrieron el camino para el reconocimiento internacional del Holodomor como genocidio. En los años posteriores el Holodomor fue condenado en sus actos como crimen de genocidio por los parlamentos de los Estados Unidos, Canadá, Estonia, Australia, Hungría, Lituania, Georgia, Polonia, Perú, Paraguay, Ecuador, Colombia, México, Letonia, Portugal. Además, en varios países de todo el mundo las decisiones para condenar el crimen de genocidio se tomaron a nivel regional y municipal.

El sábado pasado el ministro de relaciones exteriores de Ucrania Dmytro Kuleba llamó nuevamente a continuar la lucha para llevar la verdad sobre el Holodomor al mundo y reconocerlo como el genocidio del pueblo ucraniano. También agradeció a todas las comunidades ucranianas en el exterior, que constantemente informan en sus países la verdad sobre esta tragedia.

Cabe señalar que el día de la memoria de las víctimas del Holodomor el primer ministro de Canadá Justin Trudeau hizo una declaración especial. En la misma señaló que frente a la crueldad los ucranianos se mantuvieron firmes, adheridos a su idioma y su cultura a pesar de todos los intentos del régimen estalinista de reprimirlos y perseguirlos. "Durante décadas se había negado la siniestra realidad del Holodomor y se había ocultado al mundo el sufrimiento de los ucranianos. Debemos recordar las historias de las familias exterminadas y sus sufrimientos. Debemos aceptar estas duras verdades y comprometernos a actuar siempre cuando los derechos humanos estén amenazados... También reafirmo el apoyo inquebrantable de Canadá para una Ucrania libre e independiente ", enfatizó J. Trudeau.

Por su parte, el Departamento de Estado de los Estados Unidos, en un comunicado sobre el Holodomor en Ucrania, vinculó las acciones del régimen soviético contra los ucranianos con la moderna agresión de la Federación Rusa. "Actualmente Ucrania está bajo ataque de nuevo. La ocupación rusa de Crimea y la agresión de Rusia en el este de Ucrania han provocado alrededor de 13.000 muertes. Incluso ahora Moscú está tratando de manipular y destruir las aspiraciones del pueblo ucraniano. Pero en su pérfida campaña Rusia subestima la resistencia de los ucranianos y su deseo de un futuro mejor. Esta campaña está condenada al fracaso”, dijo la portavoz del Departamento de Estado Morgan Ortagus. Como ella enfatizó, "en el día en que el mundo entero recuerda a las víctimas inocentes del Holodomor los Estados Unidos reafirman una vez más su apoyo a una Ucrania democrática y exitosa, protegida dentro de las fronteras reconocidas internacionalmente, libre para determinar su propio destino".

Parece que Rusia, como sucesora legal de la URSS, debería haber reconocido este terrible crimen contra el pueblo ucraniano. Además, fue cometido por el régimen totalitario estalinista hace más de 80 años. Sin embargo, Kremlin continúa negando obstinadamente lo obvio, argumentando que la causa de la terrible hambruna en Ucrania fue supuestamente una sequía que arruinó toda la cosecha.

El periódico "Voz de Ucrania"