En la foto: en Kyiv, en el aniversario de la catástrofe del avión ucraniano en Irán, fue erguida una piedra conmemorativa en el lugar donde habrá un parque en memoria de los pasajeros y los miembros de la tripulación muertos.

A su bordo había ciudadanos de seis países: Irán, Canadá, Ucrania, Suecia, Afganistán y Gran Bretaña. 176 personas perecieron.

Este accidente aéreo, en cuanto al número de víctimas mortales, fue el mayor en toda la historia de la aviación civil ucraniana. En el momento del vuelo no había restricciones sobre los vuelos en Teherán, aunque unas horas antes Irán lanzó ataques con misiles contra las bases militares estadounidenses en Irak.

Las autoridades iraníes inicialmente negaron que el avión hubiera sido derribado, e insistieron en las causas técnicas del accidente. Sin embargo, tres días después del accidente Irán admitió que el avión fue derribado impremeditadamente por los militares como resultado de un "error humano".

La parte iraní prometió investigar el caso, castigar a los responsables y pagar una indemnización. Sin embargo, el procedimiento de investigación, así como la cuestión de los pagos fueron dilatados durante todo el año 2020. Por ejemplo, no fue hasta julio que la parte iraní entregó las "cajas negras" del avión a la Oficina de Investigación de Aviación Civil en Francia. Las transcripciones de la información de las cajas confirmaron un ataque con misiles.

Y solo en los últimos días de diciembre del año pasado Ucrania recibió un borrador del informe final sobre el accidente aéreo, elaborado por la parte iraní de acuerdo con las disposiciones del Convenio sobre Aviación Civil Internacional, para estudiar y preparar sus comentarios. Asimismo, los medios iraníes informaron que el gobierno iraní ordenó pagar una indemnización de 150 mil dólares estadounidenses a las familias de las víctimas de la catástrofe.

Sin embargo, esta información y el monto de la compensación son solo la posición y la propuesta de Irán. Después de todo, en el curso de todo el año pasado no se recibió respuesta alguna a la pregunta principal: ¿el avión fue derribado casualmente o con premeditación? Irán insiste en el "factor humano", y el caso está abierto bajo las causas de homicidio no premeditado u homicidio por negligencia.

Al mismo tiempo, la parte ucraniana duda de que el avión haya sido derribado por error. A la Fiscalía General de Ucrania también le preocupa que las autoridades iraníes guardan silencio sobre los nombres y poderes de los responsables de la tragedia. Todos los responsables de la tragedia, independientemente de sus cargos, deberían ser enjuiciados por la catástrofe en Irán del avión de las Líneas Internacionales de Ucrania. Así lo afirmó el fiscal general adjunto ucraniano Gunduz Mamedov.

Según el viceministro de relaciones exteriores de Ucrania Yevhen Yenin, solo después del restablecimiento de la justicia será posible hablar de una compensación digna para los familiares de las víctimas, para la aerolínea y los estados afectados. “Nunca trocamos la justicia por el dinero. La indemnización es importante, pero el pedido más importante de los familiares de las víctimas es la justicia. Quieren conocer las causas del desastre y ver a todos los involucrados en este crimen en el banquillo de los acusados”, enfatizó el diplomático ucraniano.

Esta posición es apoyada por otros estados, cuyos ciudadanos murieron en Irán. En el aniversario de la tragedia Ucrania, Canadá, Afganistán, Gran Bretaña y Suecia hicieron un llamamiento a Irán exigiendo que proporcione de inmediato la información completa sobre la tragedia. "Llamamos urgentemente a Irán para que brinde una explicación detallada y completa de los eventos y decisiones que llevaron a este terrible accidente aéreo, incluidas acciones concretas para garantizar que nunca vuelva a suceder. Nuestros países responsabilizarán a Irán con el fin de establecer la justicia, así como garantizarán que Irán compense debidamente a las familias de las víctimas y a los estados afectados”, dice el comunicado.

Al mismo tiempo, las autoridades canadienses ya se han opuesto a la indemnización de 150 mil dólares, ofrecida por Irán a las familias de los fallecidos en el accidente del avión ucraniano. Ralph Goodale, asesor especial de Canadá sobre este desastre, dijo que Irán no tiene derecho a ofrecer una indemnización a las familias de las víctimas de manera unilateral, y el monto final de los pagos será objeto de negociaciones entre Irán, Canadá y otros cuatro países cuyos ciudadanos fueron víctimas de la catástrofe.

Según los observadores, las futuras negociaciones con el régimen de Teherán serán difíciles y largas. El mismo seguirá tratando de eludir su responsabilidad directa por la muerte de personas inocentes, ocultar a los responsables de alto rango y minimizar el monto de las indemnizaciones, atribuyendo todo a un "error humano". Por lo tanto, creen, que ahora los esfuerzos conjuntos de los cinco países antes mencionados, así como la mayor presión internacional sobre el régimen de Teherán serán de importancia decisiva. En este sentido vale mencionar la declaración del secretario de estado de los Estados Unidos Mike Pompeo, dedicada al primer aniversario de la catástrofe aérea. Él enfatizó que durante la extensa investigación Irán continuaba protegiendo a los responsables de la destrucción de la aeronave, en particular a los del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica.

"Esperamos con ansias el día en que las autoridades iraníes valorarán la vida del pueblo iraní con el mismo celo con el que ahora encubren los crímenes de sus funcionarios", dijo Mike Pompeo.

El periódico "Voz de Ucrania"