Esta será una oportunidad importante para discutir la agresión rusa con los socios ucranianos, así como para enfatizar la necesidad de mantener el ritmo y el enfoque en el avance de las reformas", tuiteó el secretario de estado estadounidense Anthony Blinken cuando llegó a la capital ucraniana el 5 de mayo.

Muchos observadores ya han calificado su llegada como simbólica. De hecho, inmediatamente después de haber participado en la reunión de los ministros de relaciones exteriores del G7 en Londres, E. Blinken realizó su primera visita a Ucrania como secretario de estado estadounidense para realizar negociaciones bilaterales con los líderes de un estado europeo. Y fue precisamente cuando Rusia concentró el mayor grupo de tropas de choque en la frontera con Ucrania y en Crimea ocupada.

El propósito de la visita del secretario de estado fue detallado en un comunicado del Departamento de Estado de los Estados Unidos. "Anthony Blinken visitará Kyiv hoy, 6 de mayo, para subrayar el apoyo inquebrantable de los Estados Unidos a la soberanía e integridad territorial de Ucrania en el contexto de la agresión en curso de Rusia", se lee en el comunicado.

También E. Blinken durante la visita alentará a Ucrania a garantizar el progreso en la agenda de reformas, que son clave para fortalecer las instituciones democráticas, la prosperidad económica y el futuro euroatlántico.

Al mismo tiempo, en el contexto de las relaciones bilaterales de los Estados Unidos con Ucrania, el comunicado enfatiza que los Estados Unidos apoyan firmemente los esfuerzos de Ucrania para lograr sus aspiraciones euroatlánticas y construir un futuro rico, seguro y democrático para todos los ucranianos.

Con respecto a la agresión rusa contra Ucrania, se destacó que los Estados Unidos están profundamente preocupados por las acciones agresivas de la Federación Rusa y por la retórica dirigida contra Ucrania, incluida la mayor presencia de las tropas rusas en Crimea ocupada y cerca de las fronteras ucranianas. Los Estados Unidos continúan monitoreando de cerca la situación, haciendo coordinaciones pertinentes con los funcionarios, aliados y socios ucranianos. "Expresamos nuestro respeto a Ucrania por su constante moderación y dejamos claro en nuestros contactos con Moscú que Rusia debe abstenerse de las acciones agraviantes", dijo el Departamento de Estado en su comunicado.

Además, es constatado que Crimea y Donbas son Ucrania. “Los Estados Unidos no reconocen ni reconocerán nunca la anexión declarada por Rusia de la península de Crimea. Pedimos a Rusia que devuelva el control de la península a Ucrania”, se lee en el comunicado.

Los temas mencionados en el documento del Departamento de Estado se convirtieron, de hecho, en los principales de discusión durante las conversaciones entre el jefe de la diplomacia estadounidense con el presidente Volodymyr Zelenskyy, el primer ministro Denis Shmyhal, el presidente de la Verkhovna Rada Dmytro Razumkov y los jefes de las facciones parlamentarias, así como con el ministro de relaciones exteriores Dmytro Kuleba. Como resultado de estas reuniones, la parte ucraniana enfatizó que la visita de E. Blinken es una manifestación de apoyo confiable y de alto nivel de las relaciones bilaterales, una etapa importante para el mayor desarrollo de la asociación estratégica.

Al mismo tiempo, en opinión de la mayoría de los observadores, la visita del secretario de estado estadounidense claramente no tuvo como objetivo las conversaciones protocolarias, sino la solución de problemas específicos, tanto tácticos como estratégicos. Sin embargo, los detalles no se hicieron públicos. Por ejemplo, en la conferencia de prensa conjunta con E. Blinken el presidente de Ucrania dijo que se trataba de un formato de apoyo estratégico fundamental para su país por parte de los Estados Unidos, pero es demasiado pronto para hablar sobre los detalles de dicho acuerdo. Aparentemente, esto significa la posibilidad de que sea otorgado a Ucrania el estatus de principal aliado de los Estados Unidos fuera de la OTAN.

En segundo lugar, V. Zelenskyy dijo que él y E. Blinken discutieron el tema de la seguridad en los mares Negro y Azov. “Aquí vemos acciones comunes, y creo que hay una idea fundamental, por ahora tampoco voy a hablar de eso públicamente. Es necesario que todas las partes estén de acuerdo con esta idea, y luego le diremos todo al público”, dijo.

"Si los Estados Unidos realmente decidieron otorgar a Ucrania el estatus de principal aliado de los Estados Unidos fuera de la OTAN, entonces esta es una señal clara para Kremlin de que Washington no le dará Ucrania a Moscú y no la cambiará por ninguna concesión que Putin probablemente propondrá a Joe Biden en su reunión bilateral prevista para el junio", así es como el observador político Yuri Vishnevsky comentó sobre esta información.

Al mismo tiempo, la visita del secretario de estado estadounidense demostró claramente que Washington seguirá exigiendo que las actuales autoridades ucranianas continúen con las reformas y esfuerzos más visibles para combatir la corrupción. En este sentido, E. Blinken dijo que además del enemigo externo – Rusia, a Ucrania le pone obstáculos también el enemigo interno. “Son los oligarcas y personas influyentes que persiguen sus propios intereses estrechos por medios ilegítimos a expensas del pueblo de Ucrania”, enfatizó.

Mark Simakovski, experto del centro analítico del Atlantic Council en Washington, cree que el mensaje político actual que la administración estadounidense quería transmitir a Kyiv durante la visita de E. Blinken consta de tres partes.

“El primero es mostrar su apoyo a Ucrania y recordarle a Rusia que los Estados Unidos apoyarán a Ucrania mientras se enfrenta a la agresión extranjera. La segunda parte es un mensaje a los aliados europeos de un apoyo relativamente fuerte y confiado a Ucrania, que la administración Biden ve en la lista de prioridades, potencialmente quiere ayudar a Ucrania en su camino para integrarse en el sistema occidental. Y la tercera parte es un mensaje para el gobierno ucraniano de que, aunque la administración Biden continuará apoyando a Kyiv, es necesario que el gobierno ucraniano lleve a cabo reformas. Esto servirá como una señal de que Ucrania es un socio confiable para los Estados Unidos, pero hay una gran cantidad de desafíos que debe enfrentar. Creo que el presidente Zelenskyy recibirá una gran lista de requisitos para el gobierno ucraniano. Es decir, si quieren recibir la asistencia y el apoyo constante o incluso adicional de los Estados Unidos, necesitan ir a mitad del camino para cumplirlos, habiendo tomado una decisión política bastante dura”, escribió el experto.

El periódico "Voz de Ucrania"