Esta declaración se convirtió en la principal de los discursos en la cumbre de la Plataforma de Crimea, que tuvo lugar el 23 de agosto en la capital ucraniana y contó con la presencia de las delegaciones de 46 países y organismos internacionales.
Al inaugurar la cumbre, el presidente de Ucrania Volodymyr Zelenskyy dijo que por primera vez desde la ocupación el problema de Crimea se ha llevado al más alto nivel internacional.
Fue enfatizado que Ucrania misma nunca podrá devolver Crimea. "Necesitamos un apoyo efectivo a nivel internacional para el tema de la desocupación de la península de Ucrania", dijo el presidente.
Según él, para la devolución de Crimea Ucrania utilizará todos los medios legales, políticos y, sobre todo, diplomáticos.
El presidente de la Verkhovna Rada (parlamento) de Ucrania Dmytro Razumkov también pronunció un discurso en la inauguración. “La Federación Rusa separa Ucrania continental de Crimea con alambre de púas y puestos de control, pero nunca separará a las personas que viven aquí y allá, porque son un solo pueblo. Llamo a unirse en torno a los esfuerzos que está haciendo Ucrania. Solo juntos podemos superar los desafíos”, dijo el presidente del parlamento ucraniano.
El presidente polaco Andrzej Duda aseguró a los "hermanos ucranianos" que "los polacos les entienden" y "pueden contar con nuestro apoyo". Añadió que Polonia nunca reconocerá la usurpación de Crimea.
El presidente del Consejo Europeo Charles Michel también dijo que la Unión Europea no reconoce la anexión de Crimea por parte de Rusia y seguirá oponiéndose a la violación del derecho internacional.
"La posición sobre Crimea debe permanecer en un alto nivel. Es necesario mantener el orden mundial, y debemos atraer un amplio apoyo internacional de Ucrania con respecto al no reconocimiento de la anexión de Crimea. La militarización de Crimea es preocupante", dijo.
El ministro de relaciones exteriores de Turquía Mevlut Cavusoglu expresó su confianza en que la Plataforma de Crimea desempeñará un papel muy importante en la cuestión de la desocupación de la península y de la observancia de los derechos de los tártaros de Crimea.
También en la cumbre apoyaron la creación de la Plataforma de Crimea y condenaron la anexión rusa de la península ucraniana: la presidenta de Estonia Kersti Kaljulaid, el presidente de Letonia Egils Levits, el primer ministro de Suecia Stefan Leuven, el presidente de Eslovenia Borut Pahor, el presidente de Finlandia Sauli Niiniste, la presidenta de Moldavia Maia Sandu, el primer ministro de Eslovaquia Eduard Heger, el primer ministro de Croacia Andrei Plenkovich, el primer ministro de Georgia Irakli Garibashvili, el primer ministro de Rumanía Florin Kytsu, los representantes de los Estados Unidos, Alemania, Francia, Gran Bretaña a nivel ministerial entre otros.
En una declaración conjunta adoptada al final de la cumbre los participantes de la Plataforma de Crimea se pronunciaron por los esfuerzos diplomáticos conjuntos necesarios para restaurar la integridad territorial de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas.
Por lo tanto, enfatizaron que "cualquier cambio en el estatus de la República Autónoma de Crimea y la ciudad de Sebastopol como parte integral del territorio soberano de Ucrania no es ni será reconocido, y que los intentos de Rusia de legitimar la ocupación temporal y la usurpación ilegal son inaceptables».
Los fundadores de la Plataforma de Crimea confirmaron su determinación de "mantener la presión sobre Rusia para que ponga fin a la ocupación temporal de la República Autónoma de Crimea y la ciudad de Sebastopol y restablezca el control de Ucrania sobre este territorio".
Además, los participantes saludaron la creación de la Red Internacional de Expertos de la Plataforma de Crimea, teniendo en cuenta el apoyo de sus actividades, e invitaron a las organizaciones no gubernamentales internacionales y nacionales, así como a la comunidad de expertos a sumarse a las actividades de esta red.
Además, los participantes de la cumbre decidieron considerar la introducción de nuevas medidas políticas, diplomáticas y restrictivas contra la Federación Rusa "cuando sea necesario y si las acciones de Rusia lo requieran".
En la declaración los participantes pidieron a la Federación Rusa que cumpla con sus obligaciones como estado ocupante de conformidad con el derecho internacional humanitario y otras leyes internacionales aplicables.
Los participantes de la cumbre decidieron utilizar los mecanismos pertinentes de la ONU, Consejo de Europa, OSCE y de otras organizaciones internacionales y regionales para resolver problemas, así como consultar, intercambiar y coordinar sus esfuerzos en el marco de las organizaciones internacionales, en conferencias internacionales, foros y otros eventos donde se discute el tema de Crimea.
También se decidió crear una red de comunicación constante y rápida entre los representantes de los ministerios de relaciones exteriores de los estados miembros de la Plataforma, reconocer el papel de los parlamentos nacionales en la lucha contra la ocupación temporal de Crimea y fomentar la coordinación de actividades referentes a Crimea entre los parlamentos nacionales, así como en el marco de las asambleas interparlamentarias.
Según el presidente Volodymyr Zelensky, la cumbre de Kyiv finalmente devolvió Crimea a la agenda internacional.
Recordemos que la plataforma internacional para la desocupación de Crimea (Plataforma de Crimea) es una iniciativa de las autoridades ucranianas para crear un mecanismo de negociación con el fin de coordinar las acciones de Ucrania y los socios internacionales dirigidas a la protección de los derechos de los habitantes de Crimea y la desocupación de la península anexada.
El periódico "Voz de Ucrania"
