Como escribió en su página de Twitter, las últimas declaraciones y acciones de Berlín oficial no corresponden al nivel de las relaciones ucraniano-alemanas y a la actual situación de seguridad. En primer lugar, estamos hablando de las declaraciones recientes de Alemania sobre la imposibilidad de transferir armas a Ucrania, dudas sobre la desconexión de la Federación Rusa del sistema SWIFT de pagos internacionales en caso de una invasión, declaraciones sobre la inviabilidad del regreso de Crimea.
Según él, la unidad del Occidente en relación con Rusia es ahora más importante que nunca y se están haciendo grandes esfuerzos para contener a la Federación Rusa. "Los socios alemanes deben dejar de socavar la unidad con tales palabras y acciones y alentar a Vladimir Putin a un nuevo ataque contra Ucrania", dijo el ministro.
D. Kuleba enfatizó que Ucrania agradece a Alemania por el apoyo brindado desde 2014 y por los esfuerzos diplomáticos para resolver el conflicto ruso-ucraniano. "Pero las declaraciones actuales de Alemania son decepcionantes y van en contra de este apoyo y esfuerzos", concluyó.
Cabe señalar que la ministra de relaciones exteriores alemana Annalena Baerbock duda de la necesidad de desconectar a Rusia del sistema de pago internacional (SWIFT) en caso de un ataque contra Ucrania. Además, Alemania se niega a dar armas a Ucrania para protegerse contra la agresión rusa e incluso bloquea el suministro de armas alemanas a Kyiv a través de la OTAN. Por ejemplo, el 21 de enero The Wall Street Journal informó que Alemania estaba impidiendo que Estonia suministrara a Ucrania las armas de fabricación alemana que posee.
La última gota que colmó la paciencia de Kyiv oficial fueron las declaraciones del comandante de la armada alemana Kay-Achim Schönbach.
El 22 de enero, durante su visita a la India, el almirante alemán dijo que Ucrania nunca devolvería la Crimea ocupada y que no debería ser aceptada en la OTAN, y Putin realmente quiere el respeto que "quizás se merece".
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania exigió de inmediato al gobierno alemán una refutación pública de las declaraciones del comandante de la armada. En esta ocasión, la embajadora alemana fue convocada a dicho Ministerio.
Y aunque más tarde el almirante alemán afirmó que sus declaraciones sobre Crimea y la expansión de la OTAN hacia el Este son su propia opinión y no la posición oficial del gobierno federal, así como renunció de su puesto, el Ministerio de Relaciones Exteriores ucraniano expresó una "profunda decepción" por la posición del gobierno alemán, en particular, por la falta de suministro de armas defensivas a Ucrania.
Como se afirma en la declaración de los diplomáticos ucranianos, hoy más que nunca la firmeza y la solidaridad de Ucrania con sus socios son importantes para contener las intenciones destructivas de Rusia. Se enfatizó que "Ucrania espera una posición más proactiva de Alemania en el apoyo a nuestro estado, en particular en cuestiones de fortalecimiento de su capacidad de defensa contra la amenaza de una invasión rusa a gran escala, y el uso de otros medios efectivos de disuasión para garantizar la seguridad en Europa".
Mientras tanto, según el embajador de Ucrania en Alemania Andriy Melnyk, la declaración del comandante de la armada alemana puso en duda en gran medida la autoridad y la fiabilidad de Alemania, y no solo en Ucrania. Además, el embajador subrayó que las palabras de Schönbach “sumergieron a todo el público ucraniano en una profunda conmoción”, pues lo sucedido recordó a los ciudadanos de Ucrania la “actitud condescendiente” durante la ocupación nazi del país.
El historiador británico Mark Almond fue aún menos diplomático sobre la posición actual de Alemania. En su artículo, publicado en el periódico Telegraph, enfatiza que ahora es difícil decir si Alemania está lista para apoyar a Ucrania para detener una posible invasión rusa. “Su pasividad ante la crisis inminente significa que Berlín no es la columna vertebral de Europa, sino un vacío del poder en su corazón”, cree M. Almond.
El periódico "Voz de Ucrania"
