Una nueva interceptación de la impactante conversación telefónica entre una habitante «pacífica» de la Federación Rusa y su esposo, que combate en el territorio de Ucrania, fue realizada por el Servicio de Seguridad de Ucrania cerca de Kharkiv.

La mujer rusa vive en una ciudad fronteriza a la que fueron deportados los ciudadanos ucranianos. Está indignada por la posición de los niños ucranianos que se negaron a celebrar junto con sus coetáneos rusos el Día de la Victoria, que ya se ha convertido en un culto en Rusia.

–¿Sabes lo que estos niños les dicen a nuestros niños? – pregunta la mujer del ocupante. - El 9 de mayo se les pidió en la escuela que hicieran dibujos, en fin, por la festividad. Dijeron: «Ésta no es nuestra fiesta». Y sabes que cuando crezcan serán nazi, crecerán, serán iguales. Y Putin dice «¡Ven, ven a Rusia!» A estos idiotas habría que golpearlos y matarlos (dice blasfemias).

– Qué buena eres, – se ríe en respuesta el ocupante ruso.

– Les inyectaría droga, si trabajara, les miraría en los ojos y les diría: «Mueran, sufran». Cortaría sus genitales, estrellas en sus espaldas. Y en general, cada día les cortaría sus orejas y dedos para que sufran.

Al final de la conversación, la mujer rusa dice que odia a los ucranianos: «Odio a estos ucranianos en general. Hubiera matado a tiros a estos niños».

Otra conversación interceptada por el SSU entre un ocupante ruso y su jefe en el sur de Ucrania no es menos impactante. Un oficial del ejército ruso ordena a su subordinado que mate a los niños ucranianos y lo considera una muestra de coraje. Fue grabada la conversación entre el comandante del batallón de exploración ruso y un observador de tiro.
 
– Tenemos silencio aquí, – informa el observador al comandante.

«Ah, qué buen hombre eres». ¿Silencio absoluto? ¿Hay abuelas, niños? 

– Los niños cruzaron el puente recientemente. Nueve personas y sus hijos pasaron bajo el arco. Todos.

– Entendido ¿Qué llevaban?

– Nada. Parece que los niños iban a la escuela con sus maletines.

– Entendido. ¿Trabajaste?

– Todavía no.

–¿Compadeces, sí, por ahora?»

– Por ahora les he dejado pasar.

«Ah, en el camino de regreso, ¿verdad?» Debes ser atento y valiente. Estamos contigo.

– Sí, entendido.

Esta grabación, como miles de otras, será parte de una base de pruebas que Ucrania utilizará contra los ocupantes. Una cosa está clara: el «mundo ruso» no es sino el nazismo moderno, cualesquiera que sean sus consignas y objetivos. ¡Por eso debemos proteger a nuestra Patria de este nazismo!», señala el SSU.

Al comentar en las redes sociales sobre la interceptación de las conversaciones de los ruscistas que discuten formas de matar a los niños ucranianos, los usuarios escriben: «¡Si no los detenemos, irán a todo el mundo y visitarán a todos! ¡Estas son almas negras! ¡Se acerca el caos!» «Es necesario que todo el mundo, desde el más joven hasta el más viejo, escuche sobre este mal, para que no haya lugar para ellos en todo el mundo. ¡Estos no son humanos!»