Dibujo de Yuri Zhuravl

La guerra ruso-ucraniana que Rusia lanzó el 24 de febrero de este año con ataques masivos con cohetes contra Kyiv, Kharkiv, Mykolayiv, Mariupyl, Kramatorsk, Myrhorod y muchas otras ciudades ucranianas abrió, camuflándose con «gran literatura rusa» y «alma rusa misteriosa», una política agresiva, previamente desconocida para el mundo: la crueldad inhumana y a los rusos sanguinarios . Aquellos políticos, artistas, así como los europeos y americanos que esperan que con el cambio de Putin en el trono de Moscú Rusia cambie, desaparezca su feroz sed de guerra, su pasión por matar y torturar, su fervor por las atrocidades, no, no sólo contra los ucranianos, contra toda la humanidad, contra todo lo que es bello y espiritual, y esto es lo que provoca la ira satánica de los descendientes de Iván el Terrible que mató a su hijo en un ataque de ira, y de Stalin que mató en los campos de concentración a millones de sus compatriotas (ambos son héroes nacionales de Rusia), están profundamente equivocados. Putin en realidad es Rusia. Se trata de Rusia que es eternamente agresiva, malvada, insidiosa, cínica, de un país que durante siglos está amenazando o con una espada, o con el arma nuclear. Ucrania desde los días de la antigua Rus de Kyiv ha sobrevivido a casi 30 guerras ruso-ucranianas, y estos son solo ataques armados, sin tomar en consideración las guerras contra el idioma y la iglesia ucraniana, la cultura, tres hambrunas, guerras económicas.

Putin tiene planes para atacar, pero sus soldados están llevando a cabo dichos planes con una brutalidad sin precedentes. Miles, decenas de miles de los que el 24 de febrero cruzaron desde Rusia y Bielorrusia la frontera del estado soberano de Ucrania, cometieron crímenes contra civiles:  aplastaban con tanques los automóviles que transportaban personas, disparaban, incluso de la artillería, contra las columnas de evacuación, organizaban en los edificios ocupados las cámaras de tortura para los prisioneros de guerra y aquellos que parecían sospechosos o simplemente desagradables, violaban a las mujeres, hombres e incluso a los niños.

La guerra expuso la esencia de los rusos. Esta esencia también está en las enseñanzas de sus esposas que llamaban a matar, torturar, «cortar estrellas en las espaldas", cortar los dedos, las orejas y los genitales a los ucranianos.

El Servicio de Seguridad de Ucrania interceptó otra impactante conversación telefónica entre una madre y un soldado ruso que se encuentra en Ucrania.

«¡Hagan la barbacoa de estos ucranianos! ¡Peguen a los canallas! ¡Corten a todos para la barbacoa!  ¡Canallas! Yo estaba tranquila, y ahora he comenzado a odiarlos! ¡Después de todo lo que hacen, canallas!»

La «pacífica» mujer rusa acusa a los ucranianos, que defienden desesperadamente a su país del enemigo, de todos los fracasos militares y problemas económicos de Rusia. Presuntamente por su culpa el desfile del 9 de mayo no era el mismo que antes, y no hay trabajo.

«¿No sé para qué es este desfile? ¿Quién lo necesita? Es una pena ver lo todo... Duele... pero por alguna razón él decidió realizarlo. No todo el mundo está de humor… La debilidad mental es completa. Todos van tristes... Bueno, la mayoría de la gente. Entienden que con estas sanciones no habrá mucho trabajo. Han subido los precios de todo…», dice la mujer.

Otra conversación interceptada por el SSU entre un agresor ruso y su pariente o conocido muestra que los ocupantes están violando gravemente las leyes y costumbres de la guerra, utilizando en Ucrania municiones fosfóricas y de cassette. Estas armas particularmente peligrosas e inhumanas, enfatiza el SSU, están prohibidas por las convenciones internacionales. Uno de los ocupantes, hablando sobre el curso de las hostilidades, dijo: «Y así, ya ves, todo lo que estaba prohibido por las convenciones internacionales: cassettes, fósforo, nos han permitido todo, disparamos todo allí».

El SSU ha registrado repetidamente desde 2014 el uso por parte de los ocupantes rusos de los medios de destrucción prohibidos en la zona de operación antiterrorista. Tras el inicio de la invasión a gran escala, estos crímenes de guerra son cometidos a lo largo de toda la línea del frente.

Las pruebas recopiladas de los crímenes de guerra del ejército ruso serán pasadas a los tribunales internacionales. El mundo debe comprender que Ucrania lucha contra el mal absoluto que será derrotado gracias a la resistencia y el coraje de las Fuerzas Armadas, de todo el pueblo ucraniano, así como al apoyo internacional.