Oleh Bondarenko y Andriy Gerus, presidentes de los comités de la Verkhovna Rada (parlamentode Ucrania) sobre la política ambiental y gestión de la naturaleza, y sobre la energía, vivienda y servicios comunales, junto con el ministro interino de medio ambiente y recursos naturales Ruslan Strelets, pidieron al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y la OTAN que cierren los cielos sobre Ucrania. 

«Las Fuerzas Armadas están defendiendo nuestra tierra, pero los cielos ucranianos siguen siendo vulnerables. Los constantes bombardeos aéreos y de artillería del ocupante representan una amenaza directa para las instalaciones nucleares de Ucrania. Esto amenaza la seguridad y el bienestar no solo de Europa, sino también del mundo entero», dijo Oleh Bondarenko.

Su petición llama especialmente la atención al hecho de que el 9 de marzo de 2022 fue cortado del suministro eléctrico de la central de Chernobyl. Todas las instalaciones de esta central nuclear fueron conectadas a los generadores diésel de emergencia, pero solo tendrán suficiente combustible para un período de 48 horas. «Necesitamos urgentemente restaurar la energía, de lo contrario, podemos perder el control de la seguridad nuclear y radiológica en la central. El mundo se enfrentará a una nueva catástrofe nuclear”, advirtió el presidente del comité ambiental del parlamento. Los autores del llamamiento también enfatizan que la desenergización del nuevo confinamiento seguro que cubre el reactor averiado provocará la pérdida total del control sobre el sistema de seguridad del complejo, y debido al cese de la ventilación del confinamiento existe el riesgo de una contaminación radioactiva por polvo no solo en Ucrania sino también en Europa; la falta del suministro de energía para la instalación de almacenamiento del combustible nuclear gastado, que almacena alrededor de 20.000 conjuntos de combustible gastado del reactor, puede provocar una avería nuclear; los daños a la infraestructura de gestión de desechos radiactivos a consecuencia de bombardeos pueden también producir una catástrofe si no se realizarán trabajos de liquidación completas y apropiadas.

La comunidad internacional ha pedido repetidamente a Rusia que ponga fin a su agresión armada contra Ucrania y que se abstenga de atacar instalaciones nucleares, ya que esto podría resultar en una catástrofe de radiación global. Mientras tanto la pérdida de comunicación con los sistemas de monitoreo de radiación de las instalaciones nucleares de Ucrania solo empeora la situación. 

«Desafortunadamente, todas los llamamientos fueron en vano. Además, realizando constantes ataques aéreos, Rusia está difundiendo la desinformación sobre una bomba nuclear «sucia», supuestamente creada en Ucrania, y por lo tanto cuestiona los procedimientos del OIEA para el control de materiales nucleares», dijeron los presidentes de los comités y el ministro interino, pidiendo a la OIEA y la OTAN que cierren los cielos sobre Ucrania para evitar una catástrofe de radiación global. 

PS. Ya después de la publicación de este llamamiento, en la noche del 10 de marzo los agresores de Moscú dispararon contra el Instituto de Física y Tecnología de Kharkiv. Como resultado del bombardeo de la subestación transformadora,  fue desenergizada la Unidad Subcrítica de Investigación «Fuentes de Neutrones». «Una vez más, el país agresor ha cometido un acto de terrorismo nuclear. La información sobre las consecuencias del daño está siendo estudiada por el personal de la Unidad «Fuente de Neutrones», informó la Inspección Estatal de Regulación Nuclear de Ucrania.