Dibujo por Oleksiy KUSTOVSKY

Una de las historias más populares entre los "expertos" y medios de comunicación rusos es sobre los "laboratorios estadounidenses secretos" supuestamente situados en Ucrania, que producen drogas "de combate". Tales sustancias, según los propagandistas de Moscú, han sido producidas en Maryupil para neutralizar el miedo de los soldados y apoyar el espíritu de lucha del ejército ucraniano. La divulgación de este fake debería justificar el fracaso de la guerra relámpago de Putin para la población rusa y explicar por qué los defensores de la ciudad costera están aniquilando diariamente a los efectivos y destruyen el equipo del enemigo. Solo el 11 de marzo el destacamento de destinación especial «Azov" cerca de Maryupil derrotó a un grupo táctico de batallón del 102° regimiento de la 150 ° división de fusileros motorizados de las fuerzas armadas rusas. El destacamento también informó sobre la liquidación de un mayor general de las fuerzas de ocupación y publicó en Telegram una foto de este agresor muerto. Otro fake es sobre la preparación de los destacamentos satanistas en Ucrania para la guerra con Rusia.

Los medios rusos no informan sobre las pérdidas de su ejército en Ucrania y los bombardeos de las ciudades ucranianas pacíficas. Por el contrario, afirman que fue “Azov” quien bombardeó Maryupil, donde cada residente sabe quién está arrojando bombas no guiadas sobre sus cabezas. Una de estas bombas cayó sobre el teatro dramático de la cuidad con cientos de civiles en su sótano. Según los datos preliminares, fallecieron 300 personas, entre ellas la mayoría eran mujeres, niños y ancianos.

Los mosquitos “de combate" y las aves migratorias ayudan al ejército ucraniano a ganar, según los manipuladores de Kremlin. Los medios del enemigo, citando "fuentes informadas" en el ministerio de defensa ruso, dicen que Ucrania está implementando un proyecto para "estudiar la transferencia de patógenos por las aves que migran entre Ucrania y Rusia" y que portan la peste porcina africana y el carbunclo. Más aun, se dice que los patógenos están "adaptados al grupo étnico eslavo". Uno de los recursos de Internet ruso informa: “La adaptación del virus al grupo étnico eslavo en los laboratorios ucranianos constituye una amenaza más terrible y peligrosa para nuestro país. No hay guerra peor: hay protección contra un misil que vuela en nuestra dirección, pero contra un mosquito infectado de poliomielitis o meningitis…» Los fakes de los propagandistas de Moscú son multiplicados por los funcionarios rusos: el ministro de relaciones exteriores de Rusia Lavrov en una de sus declaraciones en serio enfatizó que en Ucrania estaban creando "armas biológicas de orientación étnica". La campaña de desinformación también fue apoyada por el director de cine ruso Nikita Mikhalkov. Al comentar sobre el tema de los "biolaboratorios estadounidenses en Ucrania" señaló: "Se prepararon y se probaron armas biológicas utilizando voluntarios ucranianos. Además, calcularon la trayectoria de estas aves a través de Rusia… Este es un intento completamente fascista de exterminar a la etnia eslava como tal”. Por el ministerio de defensa de la Federación Rusa también son difundidos los fakes sobre los "mosquitos de combate», murciélagos y aves migratorias que portan armas biológicas en sus alas. 

Uno de los parlamentarios rusos dijo en un programa televisivo que había el "rastro ucraniano" en la aparición del coronavirus. La sociedad rusa está acostumbrada a creer en la televisión, que dice que en los laboratorios de Kyiv, Kharkiv y Odesa los creadores de armas biológicas trabajaron en el proyecto R-781 según el que los virus deberían ser propagados por murciélagos, mientras que la cepa de influenza H5N1 de "50% de mortalidad" y la enfermedad de Newcastle, por dos especies de aves cuya ruta en otoño y primavera pasa por el territorio de Rusia. Según los propagandistas de Moscú, las aves infectadas que habían llegado de la “reserva de Kherson” fueron capturadas en las regiones rusas de Ivanovo y Voronezh. Lo más interesante es que en Ucrania no existe una zona de protección de la naturaleza con ese nombre.

Sin embargo, al llegar a Ucrania algunos de los ocupantes comienzan a ver claro. La conversación de uno de ellos con sus familiares "zombis" en Rusia fue interceptada por los servicios especiales ucranianos. – Bueno, ¿ocuparíamos toda Ucrania y qué? ¿Qué cambiaría? - dice el hombre. –¡Y allá podrían poner armas nucleares! – contesta la mujer. – Bueno, podrían lanzarlas contra nosotros, pero también estarían afectados. No es beneficioso para ellos. – Estás tan poco preparado políticamente que tengo muchas ganas de acercarme y darte un golpe. Estás defendiendo a tu gente, al país. – ¿Qué es importante para Putin, gente? Bueno, la tierra es lo más importante, el poder… Aquí les pregunto a todos, ¿necesitan nuestra ayuda? ¿No? -Estamos defendiendo nuestras fronteras para que los estadounidenses no pongan armas nucleares aquí. Y los laboratorios allá, en Ucrania, acaban de abrir, ¿sabes? Aquí nuestro ganado todo está enfermo. Y la “corona” es de allá, todo de allá. – No escuches. Bueno, ¿cómo harían todo ello? Su ganado también moriría. Aquí hay muchas granjas, no como en nuestro país. El ganado está por todas las partes. Todo el mundo tiene ganado. No tenemos eso. ¿Para qué necesitarían estos laboratorios?